La 26ª edición del Campeonato del Mundo Senior de kárate, que se celebra cada dos años, tiene lugar en Budapest (Hungría) del 24 al 29 de octubre. El prestigioso acontecimiento se celebrará en el Papp Laszlo Budapest Sports Arena, un recinto en el que se respira el ambiente enérgico del kárate de competición.
Para dar el pistoletazo de salida al campeonato, el martes se celebraron las rondas eliminatorias de Kata masculino y femenino, Kumite masculino +84kg y -84kg, y Kumite femenino +68kg y -68kg. La jornada inaugural marcó la pauta de la feroz competición que se avecinaba, ya que atletas de todo el mundo compitieron por un puesto en las rondas posteriores.
Se ha inscrito una cifra récord de más de 1.000 atletas de 103 países, lo que convierte a esta 26ª edición en el Campeonato del Mundo Senior más multitudinario de la historia de este deporte. Esta impresionante asistencia supera los anteriores récords de participación, lo que pone de manifiesto el atractivo mundial y la creciente influencia del kárate en la escena internacional.
En la categoría masculina de +84 kg, el camino hacia la final fue apasionante: el egipcio Taha Tarek Mahmoud se impuso al francés Medhi Filali. Asimismo, en la categoría de -84 kg, el egipcio Youssef Badawy, vigente campeón del mundo, defenderá su título contra el iraní Mahdi Khodabakhshi en la final.
Las pruebas de kata tampoco estuvieron exentas de emoción: el español Damián Quintero y el turco Ali Sofuoglu pasaron a la final masculina de kata. La final femenina de kata enfrentará a la japonesa Hikaru Ono y a la hongkonesa Grace Lau Mo Sheung, marcando una nueva era en el kata femenino.
En la división femenina, las categorías de +68 kg y -68 kg también han preparado el terreno para emocionantes finales. La española María Torres García defenderá su título en la categoría de +68 kg contra la japonesa Ayaka Saito, mientras que en la de -68 kg se enfrentarán la suiza Elena Quirici y la azerbaiyana Irina Zaretska.
El Campeonato Mundial Senior de Karate 2023 no sólo refleja la meticulosa preparación y el espíritu indomable de los atletas, sino que también encarna la camaradería global y el respeto mutuo fomentados a través del Karate. La histórica participación en Budapest pone de manifiesto la expansión de los horizontes y el perdurable atractivo del kárate, un deporte que sigue cautivando corazones e inspirando a atletas de todo el mundo.